Los terrarios son pequeñas maravillas ecosistémicas que nos permiten traer la belleza de la naturaleza a nuestros espacios interiores. Son como ventanas a un mundo verde y exuberante, donde las plantas y la vida microscópica conviven en armonía.
DISEÑO Y ARMADO
1. Seleccionando el recipiente adecuado:
Lo principal es que el recipiente tenga cobertura y buena visibilidad a través de sus laterales, para poder luego observar bien el paisaje. Se pueden usar frascos viejos a reciclar, acuarios chicos o grandes, cada contenedor tiene su encanto único. Aprende a elegir el que mejor se adapte a tu visión y el espacio donde lo vas a colocar.
2. Capas y sustrato:
La capa de drenaje es fundamental, se puede usar canto rodado o arena gruesa, va al fondo del recipiente antes que la tierra, y previene la compactación de la tierra en el fondo y la posible asfixia de raíces. En terrarios cerrados es mejor mezclar la tierra con fibra de coco o musgo para que el sustrato permanezca ventilado.
Por encima se coloca una capa de sustrato que puede ser carbón o zeolita, y actúa como filtro químico, ayudando a prevenir malos olores y otros posibles problemas por exceso de materia orgánica.
3. Elección de plantas y elementos decorativos:
El hardscape, que es la decoración “dura” como rocas y troncos, se coloca antes que las plantas. Observa a tu alrededor, especialmente en rincones húmedos y con poca luz, son los mejores maestros para enseñarnos cómo coexisten a escala plantas y musgo con rocas y troncos.
Decora a tu gusto con plantas chicas que toleran alta concentración de humedad y poca intensidad de luz. Podes usar plantas como helechos, musgos, fittonias, begonias o bromelias. Conoce las especies que se adaptan mejor a un terrario y aprende a jugar con pequeñas decoraciones para darle vida y personalidad.
4. Lugar a colocar:
Luego de que hayas terminado de armar el terrario y lo hayas tapado herméticamente, colocalo en un lugar donde lo más importante es que no le de la luz directa del sol y no esté expuesto a temperaturas extremas.
Podes usar una lámpara artificial de luz fría o cálida para iluminarlo en las tardes-noche, no más de 10hs de luz. Esto va a hacer que se luzca mucho más y se convierta en un foco central de atención.
CUIDADO Y MANTENIMIENTO
1. Podas y Mantenimiento Regular:
La poda o remoción de plantas sólo es necesario con aquellas que tengan un crecimiento excesivo. Quitan visibilidad al paisaje y luz a las plantas de abajo, generando que se descomponga el paisaje de abajo.
2. Abri la tapa solo en caso de ser necesario, la idea es conservar un microclima en el interior del recipiente.
3. Mantene el sustrato húmedo con agua sin cloro ni minerales.
CONCLUSIÓN:
El armado y cuidado de un terrario es una experiencia gratificante que te conecta con la naturaleza de una manera única. Con esta guía, estás listo para embarcarte en el emocionante viaje de crear y mantener tu propio rincón verde en casa.
¿Listo para comenzar tu micro aventura? ¡Manos a la obra!
Redacción: Lucía Carbajal, fundadora de AQUASSIUS